El verano parece un momento difícil para cuidarse, pero no siempre es así. Ponerse a dieta, no es sinónimo de sufrimiento. ¡Te explicamos por qué!
¿CUÁLES SON LAS PRINCIPALES BARRERAS PARA QUE UNA DIETA NO FUNCIONE?
Mala adherencia a un plan de alimentación mal formulado, problemas de horarios o antojos frecuentes de alimentos poco saludables, son los problemas más comunes que hacen que nos sintamos fracasados y frustrados por no llegar al objetivo marcado.
“No sé por dónde empezar, estoy perdido/a”, “me agobia cambiar mi ritmo de vida y mis planes por comenzar un proceso de pérdida de peso”, “me cuesta renunciar al picoteo, al chocolate o a mis alimentos preferidos”, “cuando llego al peso ideal, no tengo una reeducación alimenticia y engordo el doble”, “no puedo pasar hambre, esa sensación en el estómago continua es la que acaba haciendo que deje cualquier dieta”.
Estas son las premisas más comunes que nos encontramos en Lev. Miles de personas empiezan un plan para reducir peso en estas fechas, bien por sobrepeso o para quitarse esos pocos kilos de más que hacen que su cuerpo se vea diferente y no se encuentren a gusto consigo mismos. También, no hay que olvidar a las personas con normopeso que lo que buscan es no renunciar al picoteo y a sus caprichos, pero de forma saludable (sin extras de azúcares e hidratos, que empeoren su salud y les haga subir los números de la báscula. Afirman nuestros asesores expertos de Lev.
Por todo ello existe Lev, para eliminar las barreras más comunes de un proceso de pérdida de peso y para adecuarse al objetivo de cada persona. Las exigencias que nos marcamos muchas veces hacen que en lugar de conseguir lo que queremos, se consiga el efecto contrario, por eso es importante facilitar todo al máximo. Cuando queremos cambiar nuestras rutinas y tomar mejores elecciones para ver resultados motivantes en nuestra pérdida de grasa, es normal no saber qué estrategia seguir y cómo elegir las comidas que más nos ayudan en el proceso.
“Somos conscientes de ello y es clave ofrecer una gran variedad de comidas, todas listas para consumir. Comidas reformuladas en su composición para hacer de ellas alimentos más saludables ricos en proteínas, moderados en grasa y bajos en hidratos de carbono para que sean una deliciosa y saludable opción (tanto dulce como salado). El chocolate y el picoteo tienen cientos de propuestas con este método. Sin olvidar por supuesto el acompañamiento saludable de alimentos de la dieta mediterránea, claves para un menú saludable, como verduras y hortalizas, e incentivar así esta rutina tan beneficiosa”. Añaden los expertos de Lev.
«El Método Lev no solo se traduce en pérdida de peso, también es un cambio de estilo de vida hacia hábitos y rutinas más saludables»
El Método Lev no solo se traduce en pérdida de peso, también es un cambio de estilo de vida hacia hábitos y rutinas más saludables. Es necesario educar en una alimentación sana que aporte más energía y mayor autoestima. Un sistema de transición y variación en la elección de las comidas, donde la pérdida de grasa es progresiva sin comprometer la masa muscular, sin olvidar algo clave en cualquier proceso: no pasar hambre.
A medida que la persona va obteniendo los resultados deseados, se focaliza en la reeducación y asesoramiento para conseguir tener a largo plazo una alimentación variada y equilibrada, introduciendo alimentos saludables como frutas, lácteos, cereales integrales, legumbres, etc.
Es importante ponerse metas alcanzables y hacerlo de una forma gradual y segura. No perder la motivación, una reeducación alimenticia e ir de la mano de profesionales, es clave.
En la redacción de Beandlife vamos a probar este método.
Sigue todo el proceso en nuestra página web y redes sociales, donde mostraremos todos los detalles y no te pierdas el resultado final en el próximo número
de la revista.
¡Vamos a conseguir nuestra mejor versión!, ¿Nos acompañas en el proceso?
